20:30 hrs. Teatro Degollado
12:30 hrs. Teatro Degollado
Programa 3
La Europa de Mozart:
Bosquejos Sinfónicos Mozartianos
Marco Parisotto, Director Titular
Wolfgang Amadeus MOZART:
Sinfonía núm. 31 en Re mayor, “París”
Sinfonía núm. 38 en re mayor, “Praga”
Sinfonía núm. 36 en do mayor, “Linz”
Jueves 22 20:30 hrs.
Domingo 25, 12:30 hrs.
Junio de 2017 Teatro Degollado
Entre 1789 y 1800 fueron publicadas varias sinfonías de Wolfgang Amadeus Mozart. En aquel entonces, no tenían numeración y se dieron de conocer por sus respectivos apodos. Algunos de los apodos fueron los nombres de diversas ciudades.
La primera de esas ciudades es París, Francia. Cuando era muy niño, Mozart fue presentado al público parisino como el prodigio que era y lo elevaron al grado de ser divino. Pero al paso de los años esa actitud cambió. Con 22 años de edad Mozart marchó con su madre a París para tratar de encontrar oportunidades de trabajo ya que en Salzburgo, junto a su padre y con la sombra del arzobispo Colloredo encima de ellos, le era imposible tener un empleo fijo y (más aún) decoroso. Era la primavera de 1778 y Mozart ofreció en París el estreno de su Sinfonía concertante que sufrió –como lo relata el mismo autor- un desafortunado sabotaje. El director de los Concerts Spirituels, apenadísimo, le pidió a Mozart una nueva obra para tratar de calmar su enojo. Así, de manera muy rápida, escribió su Sinfonía núm. 31 en re mayor K. 297 que hoy día se conoce como París y con la que (con una forma musical muy atrevida) Mozart deseó callar las envidias de varios colegas en esa ciudad.
Muchos años después, Mozart ya se encontraba establecido en Viena. A finales de 1783 el compositor y su esposa regresaban a su lugar de residencia desde Salzburgo y decidieron parar unos días en Linz, Austria. Al enterarse uno de los notables de aquel lugar que el genio se encontraba ahí le pidió que escribiera una obra para ellos. En tan solo cuatro días vio la luz su Sinfonía núm. 36 en do mayor K. 425 llamada, con justeza, Linz.
En el invierno de 1786 la reputación de Mozart en Viena había decaído, mientras que su éxito en Praga (a raíz del estreno ahí de Las bodas de Fígaro) estaba en franco ascenso. Así fue que Mozart se animó a visitar Praga en enero de 1787, con dos conciertos asegurados en los que se interpretarían obras suyas. Para tal ocasión, el compositor decidió presentar una nueva Sinfonía, a la que había puesto punto final el 6 de diciembre del año anterior. Esa obra es su Sinfonía núm. 38 en re mayor K. 504, conocida como Praga.
La gente de esa ciudad abrió los brazos al salzburgués como con pocos artistas; así, este músico a quien restaban escasos cuatro años y meses de vida, se convirtió en todo un héroe musical para la hermosa e inolvidable Praga.
*Boletos a la venta en taquillas del Teatro Degollado y sistema Ticketmaster
*Charla de Apreciación jueves 19:00 hrs. y domingo 11:00 hrs.
*Descuentos del 30% a estudiantes, maestros, personas con capacidades diferentes y de la tercera edad
*Programa sujeto a cambios sin previo aviso